La Kehilá de Melilla acude
a la llamada
de los Rabinos
El pasado
domingo 12 de Agosto, por iniciativa del Rabino de Melilla Yamín Bittán y el
Rosh Kolel “Kol Yaacob” Rab Isaac Srugo.
Han convocado a toda la Kehilá para acudir a un KENES HITORERUT (Charla
para Reparación). Con el objeto de pedir por las personas enfermas, la
situación económica actual, y se vean alegradas las familias que no tienen aún
hijos.
El acto
comenzaba a las 19 horas, en la Sinagoga
Or-Zaruah, siendo numeroso el público presente.
Este día
estuvo marcado por la unión, sin distinción ni etiquetas, religiosos y o no
religioso, mayores y jóvenes, hombres y mujeres. No había diferencia,
simplemente inquietud, voluntad de asistir y mejorar como persona y Yehudí.
El turno
de conferencia lo habría el Rab Yamín Bittán. Utilizando palabras de
acercamiento y despertar por y para su
congregación, con la sutiliza de saber engrana la alabanza y
reprimenda, con sensibilidad y a
la vez firmeza. Dejó el gran mensaje, que hay que mirar a ambos lados, y ver a hermanos y hermanas. Parte de un mismo pueblo, parte de una misma
familia, conducirse por el Derej Yehudí
(Camino Judío). El Rabino está al frente
de la Comunidad desde el año
1985, Rab Yamín
El Rab
Isaac Srugo, con sus palabras exhortaba para que todos den pasos firmes en la sagrada
Torá y enseñanzas de los Rabanim. Dignos
de haber nacido como parte integral del pueblo Yehudí, por ello responsable
unos de otros. Todos y cada uno, ramas de un mismo árbol. La coherencia en el
proceder y la concordancia en nuestros actos son los que deben imperar y ser
ejemplo. Tuvo la astucia de hacer cruzar
las condiciones humanas y el Derej (Camino) de la Torá, para crear el eje
centrar de la vida judía en la casa, en el trabajo, en cualquier lugar.
Para
finalizar se recitaron las oraciones de Minjá y Arvit, seguido de Misheberaj
(Bendiciones) para los enfermos y para la Kehilá de Melilla.
El
público valoró positiva las palabras recibidas, con ganas de reconducirse y
cumplir lo que dijo el Rab Hilel “Ama al prójimo como a ti mismo”,
hacer de esta máxima la columna vertebral para conformar la vida en
comunidad.
Como
humanos nos podemos equivocar, errar, desviarnos del camino, etc. No somos ni
Moshé Rabenu, que supo soportar todas las criticas. Ni su hermano Aarón ejemplo
de humildad y un amante de la paz entre sus hermanos.
Por ello
en vez de criticar, alimentar el Sinnat Jinam (Odio Gratuito), hay que juzgar
para bien y ayudar al prójimo, sin prejuicios, ni rechazo. Aprender de la
enseñanza de los Arva Minim (cuatro especies). La persona que cumple, el que no cumple, el que sabe
pero no cumple, el que cumple pero no
sabe, las cuatros conforman el pueblo y sin una de ellas ya no es
completo.
DEREJ
ERETZ KADMA LA TORÁ,
las buenas cualidades anteceden a la Torá.
La humildad, apego al amigo, Jesed (Bondad), etc. Tender la mano en vez
de dar un tortazo. Utilizar la palabra para dar buenos consejos, y no para
lapidar y desplegar la artillería de Lashón Hará (Mala Lengua).
Jamás sacar
mal nombre, no avergonzar, no utilizar artimañas barriobajeras para hacer caer,
no tender trampa para que tropiece por el camino, no alentar en reuniones los
falsos testimonios, no ser el que tire la primera piedra.
Hay que aprender
de las personas temerosas de Ashem, de los Tsadikim, su conducta, plegarias y trato con los demás.
Han sido y son ejemplo de vida y caudal de buenas Midot (Cualidades).
Melilla
vive un antes y un después de este día, Melilla se va a convertir en el
recipiente de las Bendiciones de Ashem, una Kehilá que ha sabido responder a
esta llamada, es ejemplo a seguir.
Melilla,
siempre ha estado unida, simplemente hay que echar un vistazo atrás y y entre
otros tomar como ejemplo la vida en el Barrio Hebreo y Polígono. Cuando varios miles
de judíos vivían en casas de escasos metros y con familias numerosas. Unidos en
la Alegría, y sintiendo el calor en los momentos más triste, una gran familis.
Una gran dosis de respeto por nuestras personas honorables de la Kehilá.
Era la
época de oro de los hebreos en Melilla,
las familias en general eran más humildes, tenían menos conocimiento de
Torá. Pero poseedora de principios y
temor de los cielos en todas sus conductas.
Tiempos
pasados que han marcado los surcos de las tradiciones, costumbres, e
idiosincrasia de esta Kehilá Kedoshá (distinguida). Ejemplo en el mundo Judío,
ejemplo de grandes Rabanim, grandes personas.
Hay que
perdonar y a la vez cambiar, respetar las otras ideas e ideologías a pesar de
no compartirlas, dialogar (dos o más) no crear un monologo impositivo.
Hay que
dar el primer paso, para que Ashem tienda
su mano y nos acompañe durante el camino, ser receptivo de su compañía.